Caso 1

Hace años atrás, yo era practicante en una importante empresa. Aquí trabajaba mi jefe, con dos asistentes y yo. Por el trabajo, conviví bastante con Cesar y Anselmo (los asistentes en la empresa). Ambos tenían tiempo en este trabajo, buscaban ser promovidos.

Cesar, es una excelente persona. Profesionalmente es una persona que conoce bien su trabajo, a esto le sumamos que sabe de sistemas, hace que sea un buen colaborador y que su trabajo sea reconocido por los dueños de la empresa. Anselmo, es una persona “bastante especial”. Lo defino como una persona muy egoísta, diría hasta renegada. Entre ambos, había una rivalidad encarnada por demostrar “quien sabia más” en el trabajo (sic).

Un día se presenta la posibilidad de asumir una nueva jefatura en otra ciudad. Entre ambos, saldría la persona elegida. Los dueños de la empresa, escogieron a Cesar (no lo pensaron dos veces). Anselmo, fue dejado de lado. Eso provoco que el clima laboral se vuelva terrible. Cesar y Anselmo, ya ni se hablaban.

Cesar, ocupo la nueva jefatura y lo hizo muy bien (hasta el día de hoy sigue en el puesto). Anselmo, sigue siendo asistente en esta empresa. Ha buscado varias veces, ser promovido y no puede hacerlo. Para el, la antigüedad en un trabajo, le da este derecho (sic).

Caso 2

Lía, es una vecina que tuve hace muchos años. Era una persona bastante envidiosa y muy mala persona. Estas son algunas de las cosas, que supe de ella:

– La hija de la vecina, ingreso a estudiar a la universidad. Para ella, esta muchacha pago un cupo por ingresar. Ella no tiene capacidad para estudiar en la universidad (sic).
– Una pareja de jóvenes esposos, comenzó a construir en el segundo piso de su casa de sus papas. Ella muy suelta de huesos, dijo: ¿De dónde tienen plata para construir?. Ellos son profesores y no ganan mucho (sic).
– Ella tiene su negocio propio, en un conocido mercado. Cerca de su puesto, ha llegado un nuevo inquilino, está vendiendo bien y le está quitando gente. Cuando pasan personas que van al puesto de la competencia, les dice que lo vende ella, es de muy mala calidad (sic).
– Su hijo estudia en un colegio privado, bastante bueno. Se acaba de enterar, que el hijo de la vecina, va a estudiar allí también, este año. No es posible, que en este colegio pueda estudiar cualquier persona (sic).

Yo se los digo por experiencia propia, la envidia nunca es buena. Los envidiosos no progresan y siempre son dejados de lado por el resto de personas. ¿Están de acuerdo conmigo?.

la_envidia