Rubén Darío (RD) es un muchacho de mi barrio. Todos los años ocupo el primer puesto (tanto en primaria y secundaria). Siempre le fascino la tecnología, tuvo en claro que quería ser ingeniero de sistemas y quería estudiar en la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI). ¿Quién le puso Einstein? El palomilla del barrio: Juan Jaime (para los amigos “Periquito”). El hombre más inteligente del mundo Einstein, por eso RD, de ahora en adelante será el nuevo Einstein.
Se presentó a la UNI, a estudiar lo que tanto quería. Él fue el primer puesto en el programa ingeniería de sistemas y estuvo dentro de los cinco primeros puestos de todo el proceso de admisión a esta prestigiosa casa superior de estudios. Las autoridades de dicha universidad, le dieron un premio y hasta lo entrevistaron por la televisión. Apenas nos enteramos que ingreso a la universidad, lo buscamos y le cortamos el pelo.
Varios promotores de academias pre universitarias, lo buscaron para que digan que él se preparó en su academia, por hacer esto se ganó una importante cantidad de dinero y le regalaron una lap top de última generación. El hizo sus estudios de primer año de forma muy normal en la UNI, hasta que un promotor de una academia pre universitaria le propuso un jugoso negocio:
– Queremos que te presentes a medicina, nosotros te vamos a preparar de manera gratuita y vas a tener los mejores profesores de nuestra academia. Todo con la finalidad de que ingreses en los primeros puestos a la facultad de medicina humana (sic).
– Si ingresas dentro de los tres primeros puestos, te vamos a dar un importante premio monetario. Este premio será en dólares americanos.
– Pero si eres el primer puesto en la carrea de medicina (aparte del dinero), le sumamos que te podemos a regalar a ti y para tu familia completa, pasajes en avión y un tour a la selva con todos los gastos pagados por una semana.
– Te vamos a asignar una asignación semanal de movilidad, para que vengas a estudiar.
– Cubrimos el costo de los exámenes de admisión (de eso no te preocupes).
Un día me encontré con Einsten en la panadería del barrio, me comento que se estaba preparando para postular a medicina. Me dijo que su verdadera vocación y pasión, era de ser médico (sic). Yo le dije, te conozco de toda la vida, nunca te ha gustado la ciencia y menos la medicina, lo tuyo siempre fueron los números. Que yo sepa, se presentó dos años de manera seguida para estudiar medicina y no pudo ingresar a dicha carrera. Como no logro lo que le pidieron lo de esta academia, le dijeron hasta acá nomas.
Termino su carrera en la UNI, se cambió de barrio y nadie más supo de él. Un día “Periquito” estaba por las galerías donde venden computadoras y vio a Einstein. Él era propietario de una tienda que se dedicaba a la compra/venta de computadoras. Mi buen amigo nos comentó la buena nueva y no lo podíamos creer. Einstein no alcanzo el éxito profesional que esperábamos.
¿Ser el mejor alumno y estudiar en una universidad de prestigio nos asegura el éxito profesional?